QUERIDOS REYES MAGOS

Ya se que este año os escribo con mucha antelación, pero lo que os voy a pedir no es fácil y requiere bastante preparación, es más no creo que podáis tenerlo para el 6 de enero, pero si me lo tenéis para el año que viene, os como a besos a los tres. Se que lo que os voy a pedir parece un imposible, pero yo me resisto a creerlo, así pues paso a detallaros el regalo que quiero para este año.

Quiero que me traigáis a un hombre que me quiera, y que cumpla los siguientes requisitos:

En primer lugar, que me quiera de verdad y de forma continuada, es decir que no me quiera un día si y otro no, que su amor sea sincero, intenso y real. Que sepa que es lo que quiere en esta vida y que una de esas cosas sea yo. Que sepa amar. Que no le asuste imaginar un futuro conmigo, más bien al contrario que se ilusione con ello, y que se plantee un futuro en común. Que se quiera a si mismo, pero que a mi me quiera a ese mismo nivel. Que anteponga el “Nosotros” al “Yo”. En definitiva que no tenga miedo a comprometerse.

En segundo lugar y muy muy importante (tomad buena nota queridos Reyes) que sea fiel, que no utilice a las mujeres como objetos de su placer y satisfacción de su ego, que me respete y nunca nunca haga cosas que sabe que me van a hacer daño. Que sea sincero, que se abra a mi como yo me abriré a él, y que sepa que juntos y con comunicación se resuelven los problemas. Que el engaño y la traición no tienen cabida si se ama de verdad.

Que sepa manifestarme su amor, con palabras, miradas, sonrisas, caricias, con flores, regalos y sorpresas. Que comparta sus inquietudes conmigo, que me llame cuando esté triste y también cuando esté alegre. Que no me abandone en mis malos momentos y me apoye en ellos. Que se alegre de mis alegrías, y las celebre conmigo.

Que sepa ser honesto consigo mismo y conmigo, pero también con todos los demás.

Que sea divertido, curioso, inteligente, risueño, afectuoso, comunicativo, elegante sin ser pijo, atractivo (puesta a pedir), de izquierdas (no lo puedo evitar), que sea bueno en la cama (importante), imaginativo, emprendedor, inquieto pero también tranquilo, bondadoso, generoso y un poquito soñador, Leal, sincero, valiente, optimista, positivo, lujurioso (pero solo conmigo, of course).

Que me sorprenda con viajes, flores o una simple napolitana de chocolate.

Que por favor no sea misógino, ni machista, ni superficial, traidor, tramposo, mentiroso, egocéntrico, egoísta, que trate a las mujeres con respeto (a todas), Que sepa ver algo más que su ombligo y pensar con algo más que sus “bajos”.

Bueno Queridos Reyes, he sido bastante explicita y concreta, aunque si hay dudas no dudéis en preguntar, puedo añadir más detalles. Se que es difícil y complicado, y que puede que ese hombre no exista, porque la mayoría tienen más los aspectos negativos no deseados que los positivos anhelados. Como os decía al comienzo, quizás por mi naturaleza idealista, me resisto a cree que no haya hombres así, alguno bueno tiene que haber, es sólo que yo no me he topado con él todavía, así que ponedlo en mi camino.

A cambio os pondré una copita de anís a cada uno, y barra libre de turrones.

E.M.

PD: No hace falta que lo envolváis de regalo.