miércoles, 25 de noviembre de 2009

Trabajar no me realiza

A nadie - salvo excepciones- le gusta trabajar, pero hay personas que sí se sienten realizadas desarrollando esta labor que, en su opinión, les diginifica. A mí, hasta ahora, no es el caso. Una cuestión grave, creo, teniendo en cuenta mi supuesta "responsabilidad moral con la sociedad como creadora de opinión" y también como "agente social que interpreta la información de la forma más objetiva posible para transmitirla", labores, ambas dos, muy loadas por todos los alumnos de la facultad de Ciencias de la Información que pasan por su periodo de pavo intelectual. Yo no es que quiera hacerme la especial, pero para mí, ese nunca fue el caso, y todas las patrañas que me contaban mis malísimos profesores me daban exactamente igual.

No nací con una vocación extremadamente fuerte, y hay cosas de mi profesión que sencillamente me encantan y que desarrollaría con gusto, pero hay mil y un factores que me hacen desear abandonarla por completo. Y no, no me compensa lo bueno con lo malo, así que no tengo vocación.

No sé ni por qué escribo todo esto. Será porque hoy he tenido un día muy duro.

De verdad de la buena que no me importaría ser millonaria. No me aburriría sin tener que trabajar, os lo juro. Además, me dedicaría a cultivar mi espíritu para no convertirme en una estúpida.

¡Ay! Me acabo de acordar que eché una primitiva y no sé si me habrá tocado. Os dejo, que me hace ilusión mirarla...

lunes, 2 de noviembre de 2009

Seres Imperfectos


Tanto cuando te enamoras, cómo cuando te desenamoras te abordan ciertas inseguridades.
Cuando te enamoras porque tiendes a idealizar al otro y piensas que a lo mejor no eres lo bastante inteligente, guapa, sexy, delgada, divertida o “whatever” para él, te miras, te remiras y te sacas defectos, cuando estas enamorada esos pensamientos son intermitentes, algunas veces te sientes la reina de Saba y otras la hermana más fea de la cenicienta. La recurrencia de estos pensamiento está muy relacionada con el trato que te dispense tu pareja, si él te dice lo guapa que eres o lo mucho que te quiere, te sientes más segura, y esos pensamientos serán más espaciados en el tiempo.


Cuando la relación se rompe, cuando el amor desparece, esos pensamientos de nuevo te asaltan, te planteas si a lo mejor fuiste poco para él, que es lo que has hecho mal, etc, por muy capullo que haya sido el otro, no puedes evitar pensar que tu no has sabido estar a la altura, y esos pensamientos te torturan en ocasiones.

Luego lo racionalizas y te das cuenta de que tú evidentemente no eres perfecta, pero el otro, a todas luces, no lo es, y si tú te has podido enamorar de un ser “imperfecto”, algún día alguien se enamorará del ser “imperfecto” que eres , porque si al otro en su día lo consideraste “digno” de tu amor, porque no vas a ser “digna” del amor de quien sea.

Nunca pensé que citaría a Paulina Rubio, pero el otro día, escuchando una canción suya, me gustaron algunas estrofas, una de ellas dice “ Yo quiero que me quieras como soy, yo quiero que me quieras porque sí”. Y es eso, el que me quiera ha de hacerlo por como soy, quererme porque sí, y que ese amor resulte incontestable, que no se cuestione, si el amor se cuestiona, entonces no es amor de verdad. Yo quiero un amor de verdad, estoy cansada de sucedaneos, no quiero mas “surimi” de amor.


E.M.

domingo, 1 de noviembre de 2009

¿LA NOCHE NOS CONFUNDE?

Ayer por la noche, noche de Hallowen, salimos y lo pasamos genial, de las mejores noches de estos últimos meses,nos reímos, bailamos, y vimos a muchos niños monos, más de lo habitual, y hasta descubrimos que han abierto de nuevo el Tolouse, el cual por cierto está genial.
Bueno pues entre tanto baile, chupitos y risas,visualizamos a los chicos interesantes del local,e interactuamos, miraditas por aquí,miraditas por allá, como mucho una sonrisita y ya está, como bien me dijo anoche A.L., los tios de Málaga son unos sosos, que les cuesta acercarse a charlar contigo, y el que no lo es y se lanza, entonces lo hace de una manera que echa para atrás, y es que los lanzados son los mas impresentables. En fin que ya sabemos todas que al amor de tu vida no lo vas a encontrar en un bar, pero en fin un poco de juego si que gusta.

Pues todo ésto me ha llevado a reflexionar sobre, la imagen que percibimos de las personas en un bar, y la que `perciben ellos de nosotros. Por ejemplo, ayer coincidimos con una amiga que trajo a un amigo suyo, el amigo, simpático, empezó a “tontear” un poco conmigo, miraditas, caritas, y sugerencias del tipo se te ha derramado parte del chupito en el escote, si quieres te lo limpio, tonteó conmigo, como tonteó con las demás, por supuesto, todo es un juego, en el que te diviertes y en el que te gusta creer que gustas, se te sube el ánimo y demás, yo anoche tenía la noche ocurrente, sarcástica y picarona y seguí a ratos el juego, al terminar la noche, medio en broma medio en serio, me preguntó que si con él me quitaría de en medio un rato, para hacer otras cosas, como me quede un poco sin saber que responder que fuera ocurrente y de broma pero dejando patente que no tenía interés en ello, él se echó a reír, y me dijo, que no me preocupara, que era broma; yo me reí, pero si hubiese tenido interés, ese hubiese sido mi momento clave de flirteo y dejar mostrar mi interés, y creo que muy probablemente él hubiera caido.

¿Porqué no tenía interés?, el chico no era feo, y era simpático, peeeeerooo, no me atrajo,a lo mejor otro chico comportándose igual me atrae, o ese mismo chico en otra situación lo hace.
Mi conclusión, la noche confunde, ¿que imagen se pudo llevar él de mi, tras las cuatro chorradas que hablamos?, pues muy probablemente una imagen que no tiene nada que ver conmigo, y no es que yo no me comportara como yo soy, simplemente es que es una versión muy sesgada y tangencial de mi persona, mi “yo” de fiesta y pasándomelo bien de anoche, es solamente una pequeña parte de mi, yo soy bastante más compleja que lo que muestro un sábado por la noche.
El pensar sobre lo que pueden pensar de mi, me ha hecho ver, que yo también, si conozco a alguien por la noche sólo veo una parte muy pequeña de lo que es, quizás por eso, muy pocos chicos me parezcan interesantes de noche. Y eso es, porque claro, cuando alguien te entra para un tonteo, no suele hacer preguntas inteligentes y divertidas, se limita a decirte cuatro chorradas. Quizás deberíamos cambiar la forma de interactuar con los demás por la noche, pero es complicado cuando hablas con un desconocido encontrar un tema con el que romper el hielo, y eso si es que se atreven a romper el hielo.
Chicos de MÁLAGA, si tenéis ya 30 años y veis una chica que os gusta y os devuelve la mirada, acercaros y romped el hielo, que no pasa nada!!! Ya se que los chicos dirán que también podemos hacerlo nosotras, pero es que así pierde mucho encanto, jejeje.

Aun así, soy consciente de que es complicado encontrar al chico de mis sueños en un bar, pero conocer nueva gente y flirtear es divertido, tampoco pretendo casarme con ellos.

E.M.